EL GÉNESIS DE LA MALDAD
Cómo teme la esencia del mal el amanecer,
mas como ladrón entra cuando llega la noche
hurtando de arriba abajo los corazones sin fe
y de fe queremos hablar sin ningún reproche;
A veces creemos con miedo, mejor no creer,
con este vaivén uno no se puede detener
y aquellos que lo logran en llanto se ven
perdieron la juventud en la vida y su revés
apoderándose de ellos la implacable vejez;
Lloverán lágrimas de sal
amargas como el té;
la esperanza de paz
se esconde en la fe;
Si existe el mal, dónde está;
yo digo que existe el hombre
y en su libre albedrío se engendra
la maldad que obscurece a la humanidad